La política sanitaria bajo la lupa: El análisis de los expertos a mitad de legislatura
La Fundación IMAS ha celebrado el debate online “Los Retos del Sistema Nacional de Salud: Análisis a mitad de legislatura”, un encuentro abierto al público sobre los desafíos del sistema sanitario y las últimas leyes sanitarias aprobadas. Más de dos años después de la presentación del informe “Los Retos del Sistema Nacional de Salud en la Próxima Legislatura”, pacientes, sociedades científicas y colegios profesionales han analizado qué ha cambiado… y qué sigue pendiente.
En la mesa participaron Carina Escobar, presidenta de la Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP); Carlos Macaya, presidente de la Fundación IMAS; Javier García Alegría, internista y ex presidente de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI) y de la Federación de Asociaciones Científico Médicas Españolas (FACME); y Manuel Martínez-Sellés, presidente del ICOMEM y cardiólogo. El evento, moderado por Javier Elola, director de la Fundación IMAS, se ha celebrado en el marco del Curso de Gestión para Clínicos (2ª edición) que organiza la Fundación IMAS junto al Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Madrid (ICOMEM).
La voz de los pacientes: participación real, cronicidad y equidad
Carina Escobar subrayó que la sanidad vive “un momento complicado”, muy atravesado por la confrontación política, lo que genera “desinformación y, en muchos pacientes crónicos, desesperanza”. Pese a ello, destacó algunos avances como la reciente actualización de la Estrategia de Cronicidad. “La cronicidad tiene que estar en el centro de las políticas sanitarias porque es lo más complejo y lo que más recursos consume”, afirmó.
La presidenta de la POP insistió en la necesidad de estratificar a la población, planificar a medio y largo plazo y reforzar la continuidad asistencial sanitaria y sociosanitaria, especialmente en un contexto de envejecimiento, polimedicación y cambios en las estructuras familiares. Además, defendió el anteproyecto de ley de asociaciones de pacientes como un paso imprescindible: “Si somos un agente más del sistema, tiene que haber una ley que nos reconozca, un registro claro y un marco de financiación estable. Hoy, participar muchas veces nos cuesta dinero”.
Carlos Macaya: “La transformación del sistema es una forma de defender la sanidad pública”
El balance de Carlos Macaya sobre el grado de cumplimiento de los 10 retos del SNS propuestos por IMAS en 2023 fue abiertamente crítico: “He ido reto por reto y no hay ninguno realmente cumplido”. A su juicio, la sanidad pública está sufriendo un deterioro progresivo, visible en las manifestaciones en defensa del sistema público, el aumento de pólizas privadas o los problemas en programas de cribado y en las listas de espera.
El presidente de la Fundación IMAS advirtió del riesgo de limitarse a “medidas paliativas y parches” y reclamó una transformación profunda del modelo, basada en tres pilares: agencias sólidas e independientes de evaluación (de medicamentos, tecnologías y calidad asistencial), sistemas transparentes de medición de resultados y despliegue real de la gestión clínica con autonomía para los profesionales.
Sociedades científicas: cronicidad, salud pública y recursos humanos
Desde la perspectiva de las sociedades científicas, Javier García Alegría recordó que muchas reformas necesarias ya quedaron recogidas en la llamada “Ley de Reconstrucción” tras la pandemia, aprobada con un amplio consenso parlamentario, pero siguen sin aplicarse de forma decidida. Entre los avances recientes, destacó la Estrategia de Cronicidad, la integración de la dimensión social, la nueva Agencia Estatal de Salud Pública y estrategias en salud mental y obesidad infantil. También señaló progresos en historia clínica digital, recertificación profesional y formación continuada, con programas que alcanzarán a decenas de miles de profesionales.
No obstante, alertó de la crisis de la atención primaria, del deterioro del “contrato social” con los médicos y del crecimiento sostenido de los seguros privados como expresión de la insatisfacción ciudadana con el sistema público. Defendió una reforma profunda del Estatuto Marco que reconozca la singularidad de la profesión médica y reclamó modelos de gestión más flexibles y eficientes, como las empresas públicas sanitarias con personalidad jurídica propia, que “han demostrado una mayor eficiencia técnica e innovación”.
Los colegios de médicos piden un estatuto propio y más prevención
Manuel Martínez-Sellés coincidió en que el avance en los 10 retos del SNS ha sido limitado y subrayó que el sistema sigue “demasiado centrado en los hospitales” y poco orientado a la prevención y a la atención a la cronicidad, en un país con una de las mayores esperanzas de vida de Europa.
El presidente del ICOMEM destacó también la necesidad de reforzar la formación digital y en inteligencia artificial de los profesionales sanitarios, ámbito en el que los colegios —a través de la Unión Interprofesional— están impulsando programas específicos: “La IA ya es presente. Un médico que no la utiliza puede estar haciendo mal su trabajo, pero también quien la usa sin criterio. Necesitamos formación continuada y reglas claras”.
Sobre el Estatuto Marco, Martínez-Sellés fue tajante: consideró “un error enorme” mantener un marco único para profesiones con responsabilidades y competencias muy diferentes y defendió un estatuto propio para los médicos que permita negociar condiciones específicas, reconocer su singularidad, evitar la fuga de talento y reforzar la sanidad pública.

